domingo, 28 de septiembre de 2014

Y entonces llegó 'Boyhood'


Si la semana pasada os hablaba del referéndum de Escocia, ahora la protagonista es Cataluña (o, mejor dicho, un Artur Mas obcecado en saltarse la Ley para alcanzar una independencia que no desean todos los catalanes). Lo cierto es que con unos líderes tan incompetentes tanto en Cataluña como en el Gobierno central, uno puede acabar saturado. El domingo es un día perfecto para desconectar y yo lo he hecho con un poco de cine. En esta ocasión, la elegida ha sido 'Boyhood' de Richard Linklater, una película recién estrenada pero con más de 10 años de rodaje a sus espaldas.

                                 

Lo más novedoso y llamativo de este proyecto es que, en los 12 años de grabación, se han mantenido los mismos actores. Las cámaras han podido captar el crecimiento real del protagonista, Mason (Ellar Coltrane), pero también el del resto de personajes como sus padres, interpretados por Ethan Hawke y Patricia Arquette.

Si tuviera que definir 'Boyhood' con una palabra, no lo dudaría: real. Y es que la historia no tiene grandes giros, sino que es cotidiana y real como la vida misma. Esto hace que el espectador se sienta identificado en muchos momentos y que reflexione sobre el paso del tiempo, sobre las relaciones humanas, sobre el presente y sobre el futuro. Y, además, tiene puntos muy divertidos porque los personajes son sencillos y carismáticos.

                             

Aunque la película es larga (165 minutos aproximadamente), el ritmo es ágil y no sobra ni una sola escena. El trabajo de realización es impresionante y la calidad de la imagen se mantiene durante toda la película, a pesar de que años atrás las tecnologías no estaban tan avanzadas. Además, la película está plagada de detalles curiosos que reflejan el paso del tiempo: la evolución de las videoconsolas (desde la Game Boy color hasta la Wii), la música, el cine, etc. En definitiva, 'Boyhood' es un film muy humano que, gracias a un trabajo excepcional y al compromiso por parte de los actores, refleja a la perfección las distintas etapas de una vida. Una vida que cada uno vivimos a nuestra manera, pero que todos tenemos que enfrentarnos a ella tarde o temprano.

                             



domingo, 21 de septiembre de 2014

Escocia al ritmo de The Doors


El verano se ha acabado, hemos vuelto a la rutina y, aunque últimamente estoy bastante despistada, también me siento más motivada para leer, escribir y hacer cosas en general. Por eso, me he propuesto actualizar más a menudo este blog, una criatura a la que tengo bastante abandonada. Intentaré escribir cada domingo -porque es un día que suele hacernos bastante de rabiar- sobre lo más destacado de la semana o sobre cualquier cosa que me haya llamado la atención.

Es increíble como vemos pasar ante nuestros ojos acontecimientos históricos sin apenas darnos cuenta. Esta misma semana, los escoceses han votado 'No' en el referéndum celebrado para decidir si se independizaban o no de Reino Unido. La tensión ha permanecido hasta el último momento, y la verdad es que los partidarios de la independencia tampoco están tan lejos de sus detractores -un 44,7% frente al vencedor 55,3%-. Desde mi punto de vista, esto es lo mejor que le ha podido pasar a Escocia. Separarse de Reino Unido hubiera sido un tremendo error con graves consecuencias económicas, como mínimo. Me entristece ver como algunas personas creen que separarse de sus vecinos reforzará su identidad como pueblo. Escocia es un lugar maravilloso con personas maravillosas, al igual que Inglaterra o Gales, y el hecho de que estén unidos no va a cambiar eso. Y sí, esto lo aplico también a Cataluña. No sirve de nada crear instituciones como la Unión Europea si muchos de sus integrantes están contaminados por algo tan dañino como el nacionalismo. Las divisiones son absurdas y no hacen más que separarnos a los ciudadanos del mundo cada vez más. Pero, claro está, esto es simplemente mi punto de vista.

Debates aparte, me gustaría compartir este artículo de Phil Bennet fundamental para entender la crisis que asfixia a España y que parece resistirse a marcharse. Fue escrito en el 2010, pero es de esos artículos que nunca mueren, no solo por cómo está escrito, sino por las historias y personajes que lo convierten en algo vivo, persistente, inmortal. Utilizando al pueblo manchego de Villacañas como referencia, el periodista estadounidense explica la crisis de nuestro país vista por sus ojos extranjeros y curiosos.

Y como nunca viene mal algo de música, disfrutad conmigo de la voz de Jim Morrison en 'Riders on the storm', canción que quizá muchos conocéis, entre otras cosas, por aparecer en el videojuego 'Need for speed'. Con canciones así, es imposible no lamentarse -otra vez- por la temprana pérdida de genios como Morrison, Kurt Cobain o Jimi Hendrix (quizá os interese La maldición del club de los 27). Por suerte, siempre nos quedará su música.